Expresa:
En ocasión de conmemorar la aprobación de los Principios Rectores de las Empresas y los Derechos Humanos, en el seno del Consejo de Derechos Humanos de la ONU el 16 de junio de 2011, la particular importancia de contar con un marco de protección y respeto de los derechos humanos en el ámbito de las actividades empresariales. Que los Principios Rectores descansan en tres pilares: a) La obligación de los Estados de proteger los derechos humanos, b) La obligación de las empresas de respetar los derechos humanos y c) El acceso a mecanismos de reparación por violaciones de los derechos humanos. Que los Principios Rectores ofrecen orientaciones a los Estados y a las empresas para conducir sus políticas y acciones en el marco de respeto de los derechos humanos.Reitera:
Que las actividades empresariales pueden impactar positiva o negativamente el disfrute y el ejercicio de los derechos humanos, abarcando prácticamente todo el espectro de derechos humanos internacionalmente reconocidos. Que, en la emergencia del COVID-19, la actuación de las empresas es particularmente relevante para la recuperación económica y la promoción de nuevos modelos de negocios alineados a los Principios Rectores de las Empresas y los Derechos Humanos. Que el Grupo de Trabajo sobre las Empresas y los Derechos Humanos, ha reconocido la relevancia de las empresas en la actual emergencia, al señalar que “la pandemia mundial y la crisis económica que inevitablemente le sigue se han convertido en una prueba sin precedentes para que los gobiernos y las empresas no bajen el listón de las exigencias de las normas de derechos humanos. Es más vital que nunca que tanto los gobiernos como las empresas tomen un camino sostenible centrado en las personas, mientras luchan contra el Covid-19 y tratan de mantener las economías a flote”.Recomienda:
A los organismos Ejecutivo, Legislativo y Judicial, desde sus ámbitos de juridicción:- Proteger los derechos humanos en el marco de las actividades empresariales, promoviendo y asegurando una conducta empresarial responsable, particularmente durante la actual emergencia del Covid-19 y el periodo de pospandemia.
- Impulsar programas de apoyo empresarial, dirigidos especialmente a las micro, pequeñas y medianas empresas, diseñándolos bajo un enfoque de derechos humanos que alcance a los trabajadores y sus familias.
- Garantizar el acceso a mecanismos de reparación, y promover la rendición de cuentas de las empresas.
- Para enfrentar los impactos de la crisis de salud y las presiones económicas que ésta ha generado, adoptar políticas con un enfoque de derechos humanos, que sean participativas e inclusivas con trabajadores y clientes.
- Actuar con la debida diligencia, en el marco de la legislación y protocolos vigentes, a fin de prevenir y mitigar los efectos adversos de la pandemia sobre la salud de trabajadores, clientes y proveedores.
- Que su decidida contribución a la recuperación y transformación de la economía nacional se oriente en los Principios Rectores de las Empresas y los Derechos Humanos,.
Guatemala, 16 de junio de 2020.