Personal de la Defensoría de la Salud de la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH) realizó una verificación en el Hospital General San Juan de Dios, debido a un brote de COVID-19 en el servicio de Nefrología.
Dicha área tiene una capacidad instalada de 32 camas y el 3 de mayo, en la madrugada, se realizó prueba de hisopado a un paciente con síntomas de COVID-19, el cual dio positivo, por lo que se realizaron pruebas a los demás pacientes ingresados en el servicio, de los que 7 dieron positivo. Tres pacientes fueron trasladados al Centro de Atención de Pacientes con Enfermedades Respiratorias (CAPERE) por estar en condición moderada.
Derivado de lo anterior se cerró el servicio de Nefrología y se canceló un trasplante programado para el 3 de mayo, dando egreso a los pacientes estables. En el servicio permanecen 11 pacientes, de los cuales 7 son negativos y 4 son positivos leves; sin embargo, por padecer una patología de base es necesaria su observación.
Al momento de la verificación se constató la presencia del personal de una empresa de limpieza, la que realizaba la desinfección de las áreas y muebles del servicio antes mencionado. Se prevé que el sábado, 6 de mayo, se abra nuevamente la atención.
Guatemala, 05 de mayo de 2023.
