Recuerda:
Que en 2015, la Asamblea General de las Naciones Unidas proclamó el 19 de junio como el Día Internacional para la Eliminación de la Violencia Sexual en los Conflictos Armados. Al respecto, la Asamblea General enfatiza que la violencia sexual en los conflictos armados tiene impactos perjudiciales en el desarrollo de las y los sobrevivientes y secuelas que pueden extenderse por periodos prolongados de la vida de las víctimas.Manifiesta:
Su solidaridad con todas las víctimas sobrevivientes de violencia sexual durante el conflicto armado interno, y a quienes han denunciado estos crímenes de lesa humanidad, su agradecimiento porque con su coraje han contribuido a romper la impunidad de graves violaciones de los derechos humanos y del derecho internacional humanitario. Que la denuncia de abusos y violencia sexual durante estos meses de confinamiento, así como la atención en salud de las víctimas y la investigación penal de los casos, deben tener un carácter de urgencia, a pesar de la pandemia por el Covid-19.Deplora:
Que el Estado de Guatemala haya sido indiferente en la procuración de la justicia y reparación a las víctimas de violencia sexual, esclavitud sexual, embarazo forzado y esterilización forzada durante el conflicto armado interno, y que han denunciado a sus agresores ante las instancias de justicia.Recomienda:
Al Estado de Guatemala,- Fortalecer las acciones en materia de investigación y procesamiento penal, que quebranten la impunidad de los perpetradores y garanticen la no repetición de estos crímenes que violentan la dignidad de niñas, adolescentes, mujeres, niños y adolescentes hombres.
- Que este día sea oficialmente declarado por el Congreso de la República como Día de No Repetición y Eliminación de la Violencia Sexual en Conflictos Armados, con dos propósitos centrales: a) Implementar acciones que honren a las víctimas y sobrevivientes de la violencia sexual en Guatemala, y b) Poner fin a la impunidad de los responsables de esos crímenes de lesa humanidad.
Guatemala, 19 de junio de 2020.